Las frutas son extraordinarias y nutritivas, con alto contenido en vitaminas y minerales. Además aportan fibra que regula el tránsito intestinal y agua que nos ayuda a mantenernos hidratados a la vez que tiene un bajo valor energético. Por lo que, resulta ideal como postre o complemento en tus tentempiés y desayunos
Pero en ocasiones, este apreciado manjar se nos puede echar a perder por no saber conservarlo. Te enseñamos algunos truquillos para manipular el proceso de maduración.
Alguna vez te ha ocurrido que traes uvas a casa un poco verdes todavía y las dejas en el frutero pensando que madurarán … pero no ocurre? O metes unas manzanas en la nevera y al cabo de unos días están como las dejaste? No todas las frutas maduran al mismo tiempo ni son aptas para conservarlas en el frigorífico. Despejamos todas tus dudas para que sepas cómo y dónde manipularlas.
Frutas climatéricas y no climatéricas
Existen distintos tipos de frutas que clasificamos en función de su proceso de maduración y de si son productoras de etileno.
El etileno es una sustancia (gas) naturalmente producida por las plantas, una hormona vegetal que desencadena muchos cambios fisiológicos en la planta, como la floración, el desarrollo de la fruta y su maduración. Lo producen las frutas en pequeñas cantidades, no es tóxico y no tiene ningún efecto conocido sobre la salud.
Como el etileno es un producto natural en el proceso de maduración natural de frutas, es compatible con los principios de la producción orgánica.
Según la FAO y la OMS el etileno no tiene un impacto adverso sobre el medio ambiente o la ecología. En caso de una fuga de gas o de una emergencia, el gas puede simplemente, y de manera segura, dejarse escapar a la atmósfera.
¿Qué frutas son climatéricas?
Durante el proceso de maduración de las frutas climatéricas, hay una abundante producción de etileno, por lo que, son capaces de madurar después de haberse cosechado. Además, estas frutas responden madurando al exponerse a una fuente externa de etileno. Puede venir de otras frutas climatéricas (en el frutero de casa) o de manera artificial (en cámaras con atmosfera controlada para su venta posterior). Por lo que, el proceso de maduración pueden manipularse.
Pero cuidado con pasarse porque al madurar aumenta su contenido en fructosa y si eres intolerante te puede sentar mal.
Las frutas tropicales climatéricas no pueden cosecharse maduras. Se cosechan antes de madurar para permitir a la industria controlar mejor su calidad durante el manejo, el transporte y la comercialización final de estas frutas.
Manzanas, peras, membrillos, albaricoques, nectarinas, duraznos, mangos, aguacates, bananas, tomates, níspero, melón cantalupo, maracuyá, caqui.
Si compras estas frutas algo verdes todavía ponlas en el frutero y no en la nevera juntas y verás que en horas comienzan a madurar.
Si por el contrario, están en su punto óptimo, no debes dejarlas fuera de la nevera pues se pudrirán enseguida y harán que toda fruta que esté a su alrededor se pudra también.
Frutas no climatéricas (que no producen etileno)
Las frutas no climatéricas son frutas que no incrementan su producción de etileno cuando maduran, con lo cual, no te servirá tenerlas en el frutero junto a otras climatéricas porque no madurarán.
Cerezas, moras, fresas, berenjenas, pepinillos, pimientos, limones, naranjas, mandarinas, sandías, melones, uvas, lichis, nísperos y anacardos.
La temperatura también les afecta
La mayoría de las frutas tropicales experimentan daño por frío a temperatura entre 5 y 14°C. Frutas tales como la papaya, el plátano y la piña muestran degradación de tejidos, ennegrecimiento y sabores desagradables si se las mantiene a temperaturas bajas por algún tiempo